EE.UU. extrema la revisión de todos los pasajeros internacionales
Las autoridades de Estados Unidos, empeñadas en reforzar la seguridad aérea, comenzaron a escudriñar aún más a los pasajeros internacionales, incluso con escáneres capaces de «desnudarlos», pese a las críticas de los defensores de los derechos civiles. El reforzamiento de los controles es una respuesta al fallido atentado registrado en un vuelo con destino a Detroit el día de Navidad, en el que el nigeriano Umar Faourk Abdulmutallab intentó detonar un explosivo que llevaba oculto en su ropa interior.
La Administración para la Seguridad del Transporte (TSA, en inglés) dijo que, gracias a la colaboración «extraordinaria» de las aerolíneas, todo pasajero que llegue a EE.UU. «de cualquier parte del mundo, desde o a través de naciones que patrocinan el terrorismo o de otros países de interés, tendrá que someterse a una mayor revisión».
Así, los pasajeros de Cuba, Arabia Saudí, Nigeria, Yemen y de otros diez países son sometidos a mayores controles, como el uso de escáneres de cuerpo entero, registro corporal y una revisión exhaustiva de su equipaje de mano. Las autoridades también continuarán las revisiones aleatorias, así como mayores inspecciones de pasajeros que muestren una conducta sospechosa, explicó la oficina responsable de la seguridad en el transporte.
La lista de países que, según Washington, patrocinan el terrorismo incluye a Cuba, Irán, Sudán y Siria, mientras que la de «países de interés» incluye a Afganistán, Argelia, Irak, Líbano, Libia, Nigeria, Pakistán, Arabia Saudí, Somalia y Yemen. Las medidas de seguridad en los aeropuertos estadounidenses se incrementaron después de los atentados del 11 de septiembre de 2001.
A partir de entonces los pasajeros tuvieron que quitarse los zapatos, cinturones y prendas de abrigo antes de abordar el avión, y no llevar envases con agua u otros líquidos en sus equipajes de mano, pero después del caso del nigeriano Abdulmutallab, eso ya no basta. Cuarenta escáneres de cuerpo entero están ya en funcionamiento en 19 aeropuertos del país y se espera que otros 150 se instalen este año. Además, la TSA ha conseguido la financiación para adquirir otros 300 de estos dispositivos que permiten «ver» a través de la ropa y detectar cualquier objeto oculto.
La TSA asegura que las imágenes digitales son borradas de inmediato si no surgen anomalías cuando los pasajeros pasan los puntos de control, pero la Unión de Libertades Civiles de EE.UU. (ACLU) se queja de que estas revisiones violan la «dignidad» y privacidad de las personas. Sin embargo, la tecnología tiene sus limitaciones tanto por la cantidad de pasajeros sujetos a revisión -hasta 2,5 millones de personas viajan al día tan sólo en vuelos nacionales en EE.UU.- como por el ingenio de los terroristas.
Según advirtió en un blog Jay Stanley, un experto en seguridad de ACLU, nada puede impedir al cien por cien que no se presente un nuevo terrorista suicida con un explosivo dentro de su cuerpo.
Tras el fallido atentado en Detroit, las autoridades británicas y holandesas han decidido utilizar los escáneres de cuerpo completo para pasajeros con destino a Estados Unidos. Abdulmutallab, de 23 años, se encuentra en una cárcel en Milan (Michigan) y afronta cargos por intentar detonar un explosivo en el vuelo 253 de la aerolínea Northwest, que había despegado de Amsterdam con 278 pasajeros y once tripulantes a bordo.
Según las autoridades, el propio Abdulmutallab ha confesado que recibió capacitación de elementos de Al Qaeda en Yemen. El presidente Barack Obama, que hoy mismo regresa a Washington de sus vacaciones en Hawai, ha encargado una revisión general de los sistemas de seguridad aéreos, ante la constancia de que hubo «errores sistemáticos» que posibilitaron el fallido atentado.
El Congreso ha programado audiencias sobre el caso y, según algunos observadores, también analizará las repercusiones del uso de los controvertidos escáneres.